jueves, 16 de abril de 2015

Tecnología y Humanismo ¿La reconciliación imposible?


 La tecnología como vocación de la humanidad

Si volvemos a consideraciones estrictamente humanas, observamos  un nuevo aspecto ético en el crecimiento de la techne en cuanto aspiración humana, crecimiento que rebasa las metas pragmáticamente  limitadas de los otros tiempos. Por aquel entonces así lo hemos visto, la técnica era un dosificado tributo pagado a la necesidad, no el camino conducente a la meta elegida de la humanidad; era un medio con un grado finito de la adecuación a fines próximos bien definidos.
Hoy la techne, en su forma de técnica moderna, se ha transformado en un infinito impulso  hacia delante de la especie, en su empresa más importante, en cuyo continuo progresar que se supera a sí mismo hacia las cosas cada vez más grandes se intenta ver la misión de la humanidad, y cuyo éxito el lograra el máximo dominio sobre las cosas y los propios hombres se presente sobre la realización de su destino.
De este modo el triunfo del Homo Faber  sobre su objetivo externo representa, al mismo tiempo, su triunfo dentro de la constitución intima del Homo Sapiens, del cual solía ser en otros tiempos servidor.