jueves, 7 de mayo de 2015

¿Debemos cambiar nuestros valores conforme cambia la tecnología?

Tecnología y sistema de valores

Las innovaciones técnicas suelen repercutir en la sociedad, pues las personas y las instituciones sociales tratan de adaptar los cambios tecnológicos a la satisfacción de sus necesidades. En este sentido, cuando no se produce la armonía entre los cambios tecnológicos y el sistema de valores vigente en una sociedad, tiende a surgir el conflicto social, es decir, un estado anímico conflictivo, que altera la estabilidad y produce desequilibrio social.

A este respecto, habitualmente sucede que los sistemas de valores evolucionan mucho más lentamente que el progreso tecnológico. La ciencia y la tecnología avanzan de modo exponencial. Sin embargo, la sociedad tarda en adaptar su sistema de valores a los nuevos hallazgos y a las nuevas posibilidades técnicas. De este modo, los ideales sociales y morales siempre van a la zaga de las innovaciones tecnológicas, y con frecuencia nos encontramos poco preparados para valorar y juzgar con objetividad las aportaciones científico-tecnológicas, así como para averiguar su significado social y prever sus posibles consecuencias.