lunes, 21 de agosto de 2017

Calidad del Internet en América Latina: estar conectado no basta

Avanza el acceso; la calidad del servicio, no.

América Latina y el Caribe vive la paradoja de un crecimiento en la penetración de Internet en la región, frente a una calidad del servicio que, si bien ha mejorado, no lo hace al mismo ritmo que el acceso.

En el informe que CEPAL presenta para el año 2016, con datos que recogen el lustro que va de 2010 a 2015, se expone que, en el primer año del periodo, es decir, 2010, apenas el 7% de los latinoamericanos y caribeños tenía acceso a la banda ancha.

Para el final del lustro, esto es, 2015, la cifra de acceso a la banda ancha ya fuera en su modalidad fija o móvil, en América Latina y el Caribe registró un 58%. En otras palabras, un crecimiento de más de 50 puntos porcentuales.

El horizonte de cifras que CEPAL presenta, no obstante, ámbitos en donde los rezagos son notables. Tal es el caso de la calidad del servicio que los habitantes de la región reciben, y que suele medirse a partir del parámetro de la velocidad del Internet que se les provee.



Veamos.

Si se le colocan como referencia los 15 megabytes por segundo (Mbps) como velocidad de servicio apropiada, encontraremos que en América Latina y el Caribe, ningún país de la región alcanza al menos el 5% de sus conexiones a esa velocidad.

Planteado en otros términos, más del 95% de las conexiones a Internet en Latinoamérica y el Caribe están por debajo de los 15Mbps.

En contraste, en los países desarrollados, el número de conexiones que llegan o rebasan los 15Mbps, ronda la mitad de los accesos, es decir, es asequible a casi el 50% de quienes se conectan.

CEPAL reporta que los países de la región latinoamericana y caribeña ofrecen una velocidad promedio de entre 2 y 4 Mbps. Muy lejanas, como se ve, a la medida recomendada de 15Mbps.

Durante el primer trimestre de 2015, la velocidad promedio en América Latina y el Caribe fue de 4.7Mbps.
Mas, esto ni siquiera aplica para todas las naciones. Chile, por ejemplo, alcanzó una velocidad promedio de 7.3Mbps, la mayor de la región.

Por su parte, en uno de los casos de mayor atraso, Venezuela no llegó siquiera a los 2.0Mbps, quedándose en 1.9Mpbs.

El mismo Chile, junto con México y Uruguay son los países mejor ubicados en cuanto al porcentaje de conexiones de alta velocidad.

Sin embargo, éstas no representan no más del 15% con velocidades superiores a los 10Mbps; y cerca del 4%, con 15Mbps.

Las naciones que mayor éxito han tenido en esta materia son Corea del Sur y Noruega. En ellas, las cifras superan el 50% de conexiones por encima de los 15Mbps.

En América Latina y el Caribe, Bolivia, Paraguay y Venezuela, los países más atrasados en este ámbito. En ellos se registran apenas 0.5% de conexiones con más de 10Mbps y 0.2% con conexiones por arriba de los 15Mbps.

Velocidades menores a los 15 Mbps, suelen significar para los usuarios la dificultad para tener varios dispositivos conectados, tiempos prolongados para la descarga, cuando no que la conexión se pasme.

Así pues, la conectividad avanza, el número de usuarios crece, los servicios son cada vez más amplios y variados. La calidad es de otro siglo y representa, a no dudarlo, una de las batallas decisivas.


El autor es fundador y preside AlfabetizaDigital A.C.
@atenoriom
antoniotenorio.com